LIBROS I

Te escribo porque no creo que tenga a otra persona a la que pueda escribir (en parte porque la vergüenza ya me ha ido por las gilipolleces anteriores, en parte porque no creo en otra persona que lo entienda). Te quiero plantear algo que ahora mismo me da mucho miedo: releer libros que creo que han afectado a mi forma de ser. ¿Cuánto crees que la literatura, no en general si no ciertos libros, puede influir en tu vida? Hay dos o tres libros que siento pánico a leer de nuevo y te reto a hacerlo. Uno es Un mundo feliz de Aldous Huxley. Muy típico ¿no? Pero recuerdo que a mí me estaba afectando mucho cuando nos conocimos, sentaba la base de todo mi pensamiento político posterior y su justificación: el condicionamiento. Otro antes de que se me pase es Memorias del subsuelo de Dostoyevski. Cuántas veces me habré definido como patético y lo he llegado poner en práctica por culpa de ese libro. Lo que pienso es: ¿realmente los autores querían dejar una huella en aquellos que leyeran sus libros, consiguiendo en muchos casos hacemos desgraciados? Igual solo pretendían hacernos partícipes de su desgracia y se les fue de las manos. Igual es lo que deseaban, que algunos pocos puedan decir: mi existencia se vio machacada por leer ciertos libros. Quizá leer El lobo estepario a una edad temprana me jodió la vida. Otro libro que te amino a releer por cierto. ¡Oh!, este sí que fue fuerte…me pilló en una época pero Demian me pareció una pasada. Recuerdo que se lo regalé a [una chica] cuando la conocí, no creo que entendiera nada pues es ahora cuando yo empiezo a entender algo las cosas. Son monstruos, son excelentes, nacen de individuos que han conseguido que la esencia humana permanezca tallada el interior de algunos de nosotros a base de sufrimiento. 
Mi pregunta es: ¿preferirías no haber conocido estos libros? ¿Que Albert Camus, Herman Hesse, Kafka no hubieran aparecido entre los libros de tu padre de los años 80, raídos y con ese olor a degradación? ¿Preferirías ser feliz a, pasados los años decir: “¡Oh joder! He comprendido lo que es realmente un ser humano en todas sus facetas, he respirado tanto su dolor como su alegría, he aceptado que el dolor es tan válido como el resto de sentimientos, que sin él la vida no tiene sentido y que si no somos capaces de sentirlo a través de estos libros nos perdemos gran parte de la vida”? Puede incluso que la propia esencia de la vida. Pero ahí sigue pesando, yo tengo dudas. Un mundo feliz representa para mí la conciencia política, Memorias del subsuelo es la aceptación del desprecio a uno mismo. El lobo estepario es la incomprensión, la soledad infinita, la insignificancia de la vida. Los hermanos Karamázov es directamente la crueldad de la que mamamos y que damos a mamar, es lo que nadie querría saber jamás.

Hoy no tengo huevos de releer esas cosas. Quizás fuéramos demasiado jóvenes, y lo querían contar esos tipos era para viejos que lo disfrutan desde una cómoda posición de espectador. Malditos hijos de puta. Después de todo, aunque en parte borracho, incomprendido e infeliz, yo te debo algo. Pero hablar de la vida, cuando hablas desde lo profundo, es jodido. Yo no quiero más libros ni más películas que me enseñen lo que para otros ha sido una vida digna, bella, triste y entera. Solo quiero una vida feliz y llena de sexo.

(Año 2013)